Un revolucionario motor eléctrico llega a la industria, con la capacidad de recorrer ‘millones de kilómetros’ usando inteligencia artificial y un sistema de reciclaje sostenible. Este motor promete transformar el futuro de la movilidad eléctrica, al abordar preocupaciones medioambientales y optimizar la eficiencia energética de los vehículos eléctricos.
Un motor con mayor autonomía y menor impacto ambiental
Los vehículos eléctricos cobran cada vez más importancia en la lucha contra el cambio climático y la necesidad de disminuir la emisión de gases contaminantes producidos por los coches de combustión. Sin embargo, la fabricación y el reciclaje de baterías y motores eléctricos también tienen un impacto ambiental no despreciable, ya que requieren de la extracción y el uso de materias primas no renovables.
Según la asociación de ingenieros alemanes VDI, los vehículos eléctricos solo son mejores para el medio ambiente que los de combustión a partir de los 90.000 kilómetros recorridos. Esto se debe, en gran medida, a la producción de sus baterías.
El prototipo del Instituto Fraunhofer: el motor eco-amigable del futuro
Ante este panorama, el Instituto Fraunhofer de Alemania, en colaboración con empresas del sector automovilístico como Schaeffler, ha desarrollado un motor eléctrico que rompe moldes. Esta propuesta busca reducir los residuos generados y disminuir la dependencia de materiales raros a través del proyecto REASSERT, un sistema modular y flexible que emplea inteligencia artificial.
La clave radica en la posibilidad de desmontar fácilmente el motor, repararlo, reutilizarlo en otros vehículos y alargar así su vida útil. A través de un ‘gemelo digital’ y el uso de tecnología de inteligencia artificial, este motor puede tomar decisiones óptimas sobre el mejor destino para cada componente: reparación, reutilización, remanufactura o reciclaje directo.
Un sistema cerrado y una nueva vida para los vehículos eléctricos
El objetivo de esta iniciativa es no solo mejorar el diseño y la eficiencia de los motores eléctricos actuales, sino también establecer un sistema cerrado donde los recursos valiosos sean reutilizados, minimizando la dependencia de importaciones de materias primas y su extracción. Así lo explica Julian Große Erdmann, científico del Instituto Fraunhofer.
Actualmente, al finalizar su vida útil, los motores eléctricos son destruidos y reciclados en su mayoría, pero sus componentes individuales no pueden ser reutilizados. El proyecto REASSERT cuenta con el apoyo financiero del Ministerio Federal Alemán de Asuntos Económicos y Acción Climático, para fomentar estrategias sostenibles de retención de valor en la fabricación y el reciclaje de motores eléctricos.
En resumen, este novedoso motor eléctrico combina mayor autonomía, ‘millones de kilómetros’, y una menor huella ecológica gracias a la aplicación de inteligencia artificial y un enfoque circular en su diseño y reciclaje. Esta innovación allana el camino hacia un futuro de movilidad eléctrica más sostenible y eficiente.
