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El 40% de las familias emplea inteligencia artificial para ayudar en las tareas escolares de sus hijos
El uso de la inteligencia artificial en la educación en España
Un nuevo estudio revela el creciente impacto de la inteligencia artificial generativa (IA) en el ámbito educativo español. La plataforma educativa Empantallados ha llevado a cabo la investigación, que revela cómo los estudiantes, docentes y padres están adoptando herramientas de IA en diferentes aspectos de la educación.
La IA ayuda a los estudiantes con sus deberes
A pesar de que la mayoría de las familias no está completamente de acuerdo con utilizar IA en la educación, el 40% reconoce haber recurrido a estas herramientas en alguna ocasión para ayudar a sus hijos con los deberes escolares. De hecho, según este estudio, el 82% de los alumnos ya han utilizado tecnologías de IA, mientras que el 73% de los docentes y el 69% de los padres y madres también lo han hecho.
Interacción con chatbots y ChatGPT
Los entrevistados también han mostrado interés en experimentar con chatbots y herramientas como ChatGPT, ya que el 91% de los alumnos, el 86% de los profesores y el 71% de los padres han interactuado con estas tecnologías. Sin embargo, solo el 31% de los encuestados utiliza la IA de manera frecuente como fuente de información, siendo el alumnado el que más recurre a ella con un 40% y los profesores los que menos, con un 22%.
Formación ética y humanística para enfrentar los desafíos de la IA
Ante el creciente protagonismo de la IA en la educación, algunos expertos destacan la importancia de ofrecer a los jóvenes herramientas para abordar los desafíos que presenta, en lugar de prohibir su uso. Narciso Michavila, presidente de GAD3, defiende que la educación debe centrarse en la formación humanística, la ética y reforzar los conceptos básicos para enfrentar el impacto de la IA en nuestras vidas.
Problemas emergentes relacionados con la tecnología y las pantallas
Michavila también advierte sobre los problemas que van más allá del ámbito educativo que se asocian con el uso de la tecnología y las pantallas, como la ludopatía, los problemas de autoimagen y la sexualización de niños y niñas. Por tanto, es imprescindible abordar estos problemas y ofrecer orientación y recursos adecuados para enfrentarlos de manera eficiente y ética.