La inteligencia artificial generativa crea una división entre enfoques locales y basados en la nube, con espacio para ambos.
Introducción
La inteligencia artificial generativa (IA generativa) se encuentra en expansión y las empresas tecnológicas están explorando diferentes enfoques para maximizar su potencial. Algunas adoptan sistemas de IA local, mientras que otras apuestan por servicios en la nube. Ambas estrategias tienen sus ventajas y desventajas, y grandes compañías, como Google y Apple, exploran modelos combinados para obtener lo mejor de ambos mundos.
IA generativa local
La inteligencia artificial generativa local tiene varios beneficios. En primer lugar, permite abordar los problemas de privacidad, evitando el riesgo de compartir nuestros datos en línea. Además, mejora la velocidad y la eficiencia en dispositivos limitados en términos de conectividad a Internet.
Sin embargo, la IA local presenta una capacidad limitada por el hardware del dispositivo. Esto ha llevado a compañías como Google a anunciar su Gemini Nano, un modelo diseñado para realizar tareas básicas en dispositivos móviles sin depender de la conectividad. Apple también ha buscado una estrategia local, con el objetivo de satisfacer necesidades básicas sin requerir conexión a la nube.
Existen modelos disponibles para implementar la IA generativa localmente, pero requieren cierto conocimiento técnico para instalar y configurar, así como hardware compatible. Ejemplos de software que permite hacerlo incluyen Ollama y Opera, que permite la instalación de LLMs.
IA generativa en la nube
La nube brinda la posibilidad de ejecutar tareas mucho más complejas de IA generativa que los sistemas locales. Esto significa que todo tipo de dispositivo puede obtener resultados notables en poco tiempo cuando se accede a IA basada en la nube.
Google, por ejemplo, tiene una doble estrategia, manteniendo las funciones avanzadas de Gemini en versiones Pro y Ultra que procesan en sus servidores. También busca vender suscripciones a servicios de IA en la nube como Gemini Advanced. Por su parte, Apple intenta combinar ambas estrategias, desarrollando servidores propios y asociaciones con terceros.
Empresas como OpenAI y Anthropic no cuentan con sistemas operativos propios ni dispositivos en los que controlar los procesos locales, por lo que dependen completamente de la nube. Esto les permite ofrecer suscripciones atraentes a productos como ChatGPT Plus o similares.
Finalmente, compañías como Meta y Microsoft apuestan por la nube para ejecutar sus IA generativas, al no contar con un enfoque basado en dispositivos propios o al buscar revitalizar productos y alejarlos de su competencia.
Conclusión
La IA generativa local y en la nube ofrecen ventajas y desafíos para las empresas tecnológicas. No hay una única solución perfecta, por lo cual, muchas compañías están explorando modelos combinados que aprovechan lo mejor de ambos enfoques para impulsar el desarrollo y la adopción de la inteligencia artificial generativa.
