La inteligencia artificial transformará las búsquedas en internet, aumentando la propagación de información falsa
IA generativa y búsqueda en Google: un nuevo paradigma que plantea retos
La inteligencia artificial generativa (IA), como ChatGPT o Gemini, está transformando la forma en que interactuamos con el contenido en línea. Herramientas de búsqueda como Google, utilizadas por el 98% de los usuarios, ya están experimentando cambios sustanciales. En lugar de proporcionar una lista de enlaces a páginas web, los nuevos sistemas de IA como los «chatbots» ofrecerán información procesada y generada por ellos mismos.
¿Qué implicaciones tiene esto para el usuario?
Los expertos predicen que los usuarios, gradualmente, comenzarán a preferir este sistema basado en consultas directas y respuestas de tipo textual, imágenes o vídeos. Sin embargo, al depender de la información proporcionada por el propio buscador, los usuarios podrían enfrentarse a dificultades para verificar la fuente de los resultados obtenidos.
El profesor Carlos Gómez, catedrático de la Universidad de La Coruña, afirma: «Con la IA generativa, que la información venga del propio buscador puede crear una falsa confianza en el usuario. La solución es educar a la gente para usar correctamente estos sistemas». En este sentido, Gómez sugiere que los usuarios siempre verifiquen la información en fuentes confiables antes de confiar ciegamente en los resultados proporcionados por estos nuevos sistemas de búsqueda.
¿Cómo adaptarse a la nueva ley de IA?
Actualmente, la Unión Europea está desarrollando una normativa para regular el uso de la inteligencia artificial. Dicha normativa podría imponer multas de hasta 35 millones de euros o el 7% de la facturación global de la empresa en caso de incumplimiento. Para evitar problemas legales, los buscadores como Google o Bing podrían incluir avisos visibles advirtiendo a los usuarios sobre las limitaciones y posibles errores en la información proporcionada por los sistemas de IA generativa.
La importancia de la privacidad y seguridad en el uso de la IA
Tanto Google como Bing admiten en sus términos y condiciones que la información proporcionada por sus herramientas de IA generativa puede ser inexacta o imprecisa. Además, estas compañías recopilan datos de las conversaciones y ubicaciones de los usuarios. Por tanto, es fundamental que los usuarios sean conscientes de los riesgos de privacidad y seguridad al utilizar estas herramientas.
El profesor Senén Barro, director de Citius, considera que la mejor manera de minimizar los riesgos es ejerciendo nuestro juicio crítico y enfocándonos en la educación. «Hay que ser conscientes de que las máquinas no son infalibles, y que la inteligencia, sea natural o artificial, no puede garantizar la ausencia de errores en tareas complejas».
