La Tienda GPT prometió revolucionar el uso de ChatGPT, pero terminó convirtiéndose en un foco de spam.
La GPT Store de OpenAI se llena de spam y contenidos falsos
OpenAI lanzó la GPT Store con la misión de ofrecer una plataforma donde los usuarios de ChatGPT pudieran encontrar y descargar versiones personalizadas del chatbot, conocidas como «GPTs», para realizar tareas específicas. Esta iniciativa también brindaba una oportunidad de negocio a los desarrolladores que quisieran crear y vender sus propias GPTs. Sin embargo, pocos meses después, la GPT Store se ha convertido en un foco de spam y contenidos no autorizados debido a la falta de moderación adecuada.
Spam y violaciones de derechos de autor en la GPT Store de OpenAI
Un informe realizado por TechCrunch expone el estado crítico del catálogo de GPTs en GPTStore. Al analizar los GPTs disponibles en la plataforma, se ha descubierto que muchos de ellos presentan descripciones incorrectas o engañosas y, en algunos casos, incluyen contenidos que infringen derechos de autor.
Para publicar GPTs en la tienda, los desarrolladores deben verificar sus perfiles de usuario y enviar sus propuestas al equipo de revisión. OpenAI asegura que el proceso de verificación combina revisiones humanas y sistemas automatizados para identificar GPTs que incumplan las políticas de uso. No obstante, las medidas de control parecen ser insuficientes.
A comienzos de este año, la GPT Store contaba ya con más de 3 millones de GPTs. Sin embargo, la calidad de los contenidos parece haber sido sacrificada en pos de la cantidad. Muchos de los GPTs disponibles utilizan material proveniente de películas, series de televisión o videojuegos sin autorización, otros promueven servicios de suscripción prémium ajenos al propio ChatGPT Plus y algunos incluso suplantan la identidad de celebridades como Barack Obama, Elon Musk o Donald Trump, algo prohibido por las políticas de la plataforma.
Lecciones de las tiendas de aplicaciones para OpenAI
El problema que enfrenta la GPT Store de OpenAI no es desconocido para gigantes tecnológicos como Apple y Google, quienes en sus comienzos también tuvieron que lidiar con la moderación en sus tiendas de aplicaciones. A medida que App Store y Google Play Store crecían, ambas empresas implementaron técnicas de revisión y moderación más rigurosas para garantizar la seguridad de los usuarios.
El crecimiento de la GPT Store ha sido vertiginoso y, posiblemente, OpenAI no ha podido gestionar la avalancha de spam. De cara al futuro, será necesario aplicar medidas efectivas para garantizar una plataforma segura y de calidad, cumpliendo así las expectativas prometidas en la creación de la GPT Store.
